PRIMER INTENTO DE PUESTA EN MARCHA DEL BANCO DE TIEMPO

Ha llegado la hora de la verdad, durante la última semana de diciembre hemos intentado poner en marcha el banco de tiempo con los alumnos de primero de la ESO, sin embargo a pesar de tener elaborado el sistema, las reglas, etc, hemos tenido una serie de contratiempos:
En primer lugar, que algunos de los pocos alumnos que se habían comprometido a realizar las actividades, se habían puesto malos.
En segundo, que el tiempo estimado para cada uno de los cambios de actividad ha sido muy reducido.
Es necesario destacar que teniendo en cuenta la gran cantidad de dificultades iniciales, decidimos reconducir la actividad para intentar ajustarlo, de forma que se desarrollase una distribución en forma de gyncana.
El resumen de todo el proceso incluido el spot publicitario quedan reflejados a continuación:
SPOT PUBLICITARIO DEL BANCO DE TIEMPO:

 PUESTA EN MARCHA DE ALGUNAS ACTIVIDADES:

PREPARANDO LA ACTIVIDAD

ESCUELA DE TENIS

DESARROLLO DE LOS MATERIALES

VALORACIÓN DE LA ACTIVIDAD:

Entre los miembros del grupo y de forma consensuada estos han sido los aspectos a destacar:

Positiva: pero nunca se habría pensado la dificultad de realizar una actividad de este tipo, ni lo que lleva aparejada la misma. A pesar de ello, hemos cambiado el chip, con respecto a  lo que es una programación,  la planificación que hay realizar, y de lo dificil que es motivar a los alumnos de una determinada edad.

Por otro lado en cuanto a la elaboración y creación de manteriales, nos ha resultado bastante dificultoso al incio el pensar qué nos gustaría a nosotros que nos ofreciesen, y que tuviera el componente lúdico de juego y por otro lado educativo. 

El trabajo en grupo y el tiempo marcado también han supuesto dificultades; unas veces por falta de cooperación y de trabajo en equipo, y otras por no mantener una visión realista de las horas de las que disponemos.

Sería interesante mejorar la asignación de los grupos, la posibilidad de excluir a aquellos que no realizan un mínimo de trabajo, y concretar con los alumnos a los que nos dirigimos qué les puede o no gustar.